Exposición N° 12. La Ilustración.

La ilustración

Ambiente sociocultural en el que surgió la Ilustración.

La crisis de la conciencia europea. El pensamiento del silo XVIII tiene sus orígenes en el periodo de la crisis de la conciencia europea, entre 1680 y 1715. En la primera mitad del siglo XVII, el panorama intelectual estaba dominado por: los autores clásicos grecolatinos y la Biblia cristiana. Pero los acontecimientos ocurridos durante el siglo XVII- la revolución científica, la transformación de la economía, la evolución tecnológica y el descubrimiento de otras tierras y otras culturas- cambiaron y modificaron sustancialmente las ideas de los intelectuales.

Hacia 1680, comenzó a gestarse un movimiento de crítica racionalista impulsada por los científicos y los filósofos.

La expansión del mundo. La revolución intelectual relacionada, a su vez, a su vez con la extensión del espacio humano. Los descubrimientos geográficos, mejoraron sus conocimientos acerca de la Tierra y pudieron percatarse de la existencia de otros pueblos.

Pero lo más importante para el cambio de perspectiva en la mentalidad europea, fue el encuentro con los pueblos indígenas de África y América. La existencia misma de estos no mencionados en la Biblia, causó un fuerte impacto en la visión del mundo de los europeos y conmociono sus ideas religiosas, no dudaron en calificar la cultura de los pueblos-como salvaje y primitiva-.

Esta perspectiva que se mantuvo entre los antropólogos europeos hasta fines del siglo XIX, sostenía la idea de la existencia de dos mundos contrapuestos (uno, el europeo, civilización y el otro, el indígena, salvaje y primitivo) creencia que apoyó la existencia de los indígenas con el pretexto de “incorporarlos a la civilización”. En algunos casos se idealizo al indígena como un “buen salvaje” poseedor de una bondad ingenua que el hombre europeo había perdido.

Origen social de los filósofos ilustrados.

Los ilustrados provenían de un grupo acomodado y con fortuna que, integrado en cierto modo en el sistema feudal, vivía esencialmente de la renta de la propiedad agraria y de la pensión de la corte.

Gracias a la fama y al nivel de sus ingresos, los ilustrados ascendieron socialmente y algunos consiguieron también títulos y privilegios de los grados inferiores de la nobleza

El ambiente intelectual. La nueva mentalidad del silo XVIII abandonaba la tendencia pesimista derivada de la creencia en el pecado original para sustituirla por otra.

Fue en Francia donde el ambiente intelectual se presento más favorable a esta nueva mentalidad. En los años cuarenta y cincuenta, este país se convirtió en el centro de la cultura del Siglo de las Luces. Además el ambiente político en este país se volvió más tolerable hacia las ideas de los intelectuales, ahora el rey Luis XV se había propuesto colaborar con los intelectuales con el objetivo de engrandecer al Estado y hacer frente a la amenaza británica, sobre todo cuando Gran Bretaña volvía a ser la principal antagonista.

Características generales del pensamiento ilustrado

a) El papel de la razón humana. Para los pensadores ilustrados era necesario que se abandonaran las creencias religiosas. Mientras se mantuvieran esa creencia, el estudio de la naturaleza se mantendría dentro de la teología y la educación seguiría en manos del alto clero. Por ello, los filósofos ilustrados difundieron la idea de que la razón humana constituye el instrumento que debe servir de guía para investigar el funcionamiento de las leyes de la naturaleza. Si el hombre quiere alcanzar el progreso, el único camino a seguir es descubrir las leyes naturales y actuar de acuerdo con ellas, suprimiendo lo irracional.

b) La creencia en la igualdad. Si todos los hombres proceden de la misma naturaleza y todos poseen la capacidad de razonar, entonces todos los hombres son iguales ante la luz de la razón y tienen iguales derechos, los cuales deben ser respetados.

c) La lucha por la libertad, tanto en las políticas, en las económicas, intelectuales, y religiosas.

d) La defensa de la religión natural, llamada también deísmo, Dios y el alma no pueden llegar a ser conocidos por la razón humana-ésta se refiere a lo abstracto, lo no manifiesto en la realidad física- y no a lo que puede ser percibido mediante los sentidos.

e) La defensa de una moral laica, es decir, independiente de la religión.

Influencia de John Locke

Las ideas del filosofo inglés John Locke influyeron en el pensamiento ilustrado, sobre todo mediante su obra Ensayo sobre el gobierno civil, publicada en 1690, se refiere a que los seres humanos se encontraban en esa condición poseen ciertos derechos, entre los que destacan el derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad.

Locke establece que la sociedad civil surge para el mantenimiento de esos derechos y puede ser justamente disuelta en cualquier momento en que el gobierno los viole.

Señala que el gobierno deberá estar dividido en dos poderes: el legislativo, al que considera como supremo por representar a la mayoría de la comunidad y en quien se deposita la facultad de crear las leyes, y el Ejecutivo que depende en general del Legislativo.

Representantes de la ilustración francesa

Los principales representantes son. Voltaire, Montesquieu, Rosseau, Diderot y Quesnay.

Voltaire, fue un gran pensador y un escritor fructífero; su filosofía racionalista se inclina particularmente a la defensa de los derechos del hombre, postula que todo ciudadano debe ser libre para seguir los dictados de su razón, siempre que con ello no perturbe el orden de la sociedad. Voltaire insistió en que debería permitírsele seguir sus propias opciones respecto a la religión y practicar sus creencias.

Montesquieu, escribió una obra que titulo El espíritu de las leyes, entendiendo ese espíritu como la razón que por naturaleza posee todos los hombres por igual, y que les permite crear leyes justas para el mutuo respeto de los derechos naturales. Postula la necesidad de tres poderes: el Legislativo o parlamentario, el Ejecutivo correspondiente al monarca, y el Judicial integrado por los jueces.

Jean Jacques Rosseau, anteponía el sentimiento a la razón con base en la idea del buen salvaje; en otras palabras, la civilización había corrompido a los hombres y, por tanto, suponía que quienes se mantienen en estado natural de salvajismo conservaban todavía la pureza y bondad ya perdidas por los europeos.

“El hombre nació libre y donde quiera que está se encuentra encadenado”, expresó Rosseau para justificar la necesidad de establecer, por “voluntad general” un contrato social que garantizara el respeto mutuo de los derechos humanos otorgados por la naturaleza.

Se trata de la voluntad de la comunidad como un todo del que cada individuo forma parte, y es distinta del deseo del ciudadano tomado aisladamente.

Para Rosseau, el gobierno no debería ser más que el representante de la voluntad general, y debería permitirse que todo el pueblo participe en la creación de las leyes y en la elección de las personas que han de velar por su cumplimiento.

Diderot, escribió varias obras pero su fama se debe , un resumen de todas las ciencias humanas producidas por los pensadores contemporáneos, al que llamó Enciclopedia o Diccionario de las ciencias, de las artes y de los oficios por una sociedad de entes de letras, publicada en Francia entre 1751 y 1772.